domingo, 2 de junio de 2019

GRACIAS, TÚ


Ya empieza a conocerse bien, o al menos mejor. Ya no es la profesión ultra desconocida de hace años. El acompañamiento al empleo, ya nos suena, la orientación laboral está casi en la cotidianidad. Pero seguramente la mayoría de las personas no conocen en profundidad a la figura del técnico de empleo.

Y no me refiero a cuáles son sus funciones, o cuales han de ser sus competencias, o qué perfil es el adecuado. Sino a la persona que hay detrás del técnico de orientación y acompañamiento al empleo. En primer lugar, le vamos a cambiar la terminación, porque el 90% son orientadorAs, ese dato ya nos acerca un poco más a la figura real de la que quiero hablaros. Pero, sobre todo, a las que quiero mostrar agradecimiento.



Gracias, porque tu papel no es, como muchas piensan, tres tutorías, un currículum y cuatro sesiones grupales. Es mucho más. Gracias por la integralidad.

Gracias, orientadora, porque tu primera sesión es a menudo la catarsis de una vida a la deriva, real o magnificada, que has de contener y calibrar, que sostienes con destreza para que no se desmorone, y que, en medio del huracán, has de reconducir hacia la esperanza.

Gracias, porque desde ese momento estás haciendo terapia (entiéndase el término alejado de la clínica), pero sí en muchas ocasiones cubriendo un servicio que debería venir dado como derecho ciudadano y que ejercemos otras figuras con la templanza que da la experiencia.

Gracias por la inquietud con la que esperas si vendrá o no la segunda sesión… si vuelve ¿algo fue bien?, y si no, ¿dejadez o insuficiencia?

Gracias por la sonrisa de recibimiento. No, no es tan habitual. Sí, es muy necesaria. Puede cambiarlo todo.

Gracias por diseñar sesiones de intervención grupal que despertarán sueños y renacimientos, que recuperan la chispa interior, que tejen redes irrompibles, que infunden (auto)confianza, empujan a la sonrisa, recuerdan esencias, cambian miradas, devuelven las ganas de hacer y ser, y dibujan futuro. Gracias por hacer todo esto, muchas veces, después de cenar o el sábado por la tarde…

Gracias por apostar por aquella persona que hasta a ti te da miedo que abandone, pero a quien transmites tu entera confianza, para que se enganche a través del vínculo y triunfe gracias a su esfuerzo y talento, del que ni era consciente.

Gracias por la lupa que facilitas a las personas empequeñecidas, mediante la cual consiguen verse, verse mejor, verse más, verse real, crecer, ser.

Gracias por seguir buscando acciones formativas que tengan algo de innovadoras, algo de motivadoras, algo de futuribles, algo de accesibles… para que le sirva, le cualifique, le capacite, le brinde oportunidades.

Gracias por esperar hora y media en una sala o un pasillo, hasta que te recibe una persona en una empresa a la que has de convencer de todo lo anterior, y conseguir que te lo compre, que crea en ello, que nos acompañe. Gracias por hacerlo sacrificando tu conciliación.

Gracias por la llamada maternal cuando te avisan en la empresa que alguien no ha asistido a las prácticas, y das la cara por esa persona, mientras por la otra línea le pegas un rapapolvo que tumba cualquier excusa.

Gracias por la incesante búsqueda de posibilidades, por las llamadas infinitas cazando oportunidades, por diversificar opciones por si acaso.

Gracias por ESA llamada: mañana tenemos entrevista.

Gracias por ESA llamada: Has sido seleccionada.

Gracias por esos días en lo que piensas: no llego. Y coges aire, y piensas “Por ell@s, sigo”. Y a veces cuesta un enfrentamiento personal, un restar tiempo a ‘lo otro’, un anochecer en la oficina. Pero, por ell@s, sigues. Es la diferencia entre profesión y vocación.

Gracias por hacerlo todo al módico precio de los salarios en el ámbito social… porque claro, todo lo anterior, que tiene como consecuencia, “simplemente” cambiar vidas, no se puede comparar a otros rangos salariales industriales o financieros, porque par favar, lo social, da gracias que es remunerado, calla ya.

Gracias por la resiliencia, que está muy de moda ahora, pero nosotras la conocimos hace mil. Nos la enseñaron nuestras persona beneficiarias.

Gracias por la gestión, que nos come, nos come, y cada vez parece que ocupa más, restando espacios al alma de la ocupación. Hace posible que sigamos, pero, ¡ay!, como cuesta, como limita, como restringe. A ver si la dichosa transformación digital nos aporta algo en esto 😊

Y gracias por la ternura, la adaptabilidad, la frescura, la ilusión, la fortaleza, la alegría, la empatía, el valor, las risas, las lágrimas, el abrazo laboral, el personal, el guiño valiente, el ver más allá, el empuje, la improvisación, el apoyo, … el acompañamiento incondicional.

Gracias por elegir, o dejaros elegir, por la profesión que ensancha el alma de todas las partes implicadas. Por hacer que TODO ENCAJE.

Lo que haces, marca la diferencia.

21 comentarios:

  1. Ahí le has dado Lara, buen texto. La orientación laboral tan bonita como sufrida, ¡seguiremos de pie! Un saludo.

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    1. Gracias Iñaki!! Así es... te da y te quita, pero siempre compensa!! Un abrazo!

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  2. ...gracias a ti, por ponerlo en valor!!
    ...vaya post bonito que has escrito!!
    David Barreda

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    1. Gracias jefe! Cuando se está enamorada, ya sabes... y esta profesión enamora, en todas sus vertientes... qué te voy a contar! Abrazo fuerte!

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  3. Enorme Lara, enorme!
    Gracias por escribir algo tan real y tan de verdad.

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    1. Ay Enrique, me estáis emocionando. Tú sabes que, efectivamente, es REAL, así es esta maravillosa profesión... Gracias por pasarte y comentar. Un abrazaco!!

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  4. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  5. Gracias por el artículo en que no identificamos tantos de nosotr@s. Brillante y sobre todo escrito desde el corazón para facilitar y conectar personas, para compartir y generar, para ayudar y facilitar. Qué cómodo me he sentido leyendo lo que día tras día aflora en nuestro interior. Gracias Lara.!!!!

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    1. Gracias, gracias, gracias compañero, es de lo que estamos hechos! Tan especial y tan magnífico! Un beso!

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  6. Mejor no se puede plasmar, me ha hecho sentirme más satisfecho y orgulloso aún de dedicarme a este bonito mundillo. Gracias.

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    1. Muchísimas gracias por pasarte y comentar, una alegría que te haya hecho sentir así!! No es para menos! Un abrazo!

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  7. Maravilloso!! Gracias x plasmarlo tan bien, desde luego q la nuestra es una profesión de corazón.

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    1. Muchas gracias!! Esta profesión, efectivamente, da para mucho... un saludo!

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  8. Gracias por contar todo lo que hacemos, por reconocer un trabajo tan bonito y tan satisfactorio. Enhorabuena

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  9. Gracias por poner palabras a mi pasión,: orientar, guiar, formar, escuchar, empoderar...

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    1. Gracias por tus palabras, cuando se siente esa pasión, es cuando se entiende! Un abrazo!

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  10. Diego Serrano Pérez4 de junio de 2019, 12:11

    Por mucho que se explique es difícil entenderlo desde fuera. Es como si el espectador desde su televisión quisiese entender lo que se siente cuando juegas el partido.
    Cómo siempre, un post con carga de profundidad, enhorabuena.

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    1. Muchas Gracias compañero, efectivamente, lo sentimos y entendemos los que lo vivimos! Un abrazo enorme!!

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  11. Qué bonito y cuanta verdad hay detrás.Si fuese al contrario sería imposible escribirlo así.

    GRACIAS!

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